Cynicism 2
Cynicism 2
A partir de una premisa moral, el cinismo, Technologies To The People se apropia de la promoción del Principado de Liechtenstein como estado liberado de tasas para las empresas. Un paraíso fiscal en Europa. Capturado íntegramente por parte del artista, con intervención al final a modo de moraleja, pone de relevancia la ambigüedad moral, tanto de la política como de las economías de estado, como ejemplo del debate sobre la legalidad de las denunciadas como prácticas piratas en la red.
«If you drive a car, i'll tax the street
If you try to sit, i'll tax your seat
If you get too cold, i'll tax the heat
If you take a walk, i'll tax your feet
Taxman»
(The Beatles, “Taxman”)
El éxito del Principado de Liechtenstein (entre Suiza y Austria, sin salida al mar) como paraíso económico (sin impuestos patrimoniales, de compra o sobre beneficios, con la única obligación de pagar una tasa muy reducida por el capital disponible) es confirmado, además por su particular derecho de sociedades y una fisclaidad intensamente liberal. Edén monetario similar a Suiza, Luxemburgo, la Islas Caimán o las islas inglesas Jersey, Guernsey e Isla de Man. En este spot se plantea que en el Principado de Liechtenstein no existe la carga de impuesto de otros países, que casi obligan a casarse con hacienda. Los impuestos del estado son representados por un recaudador de impuesto (taxman) con el que se ha cargar y compartir todo, hasta la mujer. El anuncio, creado por la agencia francesa Lupo Productions*, es aderezado por la canción de The Beatles Mr. Taxman y, originalmente cierra con las frases «Porque el infierno existe nosotros creamos el paraíso. Liechtenstein, life differently». Technologies To The People prolonga el espacio negro del final para introducir las afirmaciones en inglés: «Western Cynicism Doesn’t Help. Go Start Something!» con risas de fondo transformando la cita en un revulsivo para la acción.
Ante las acusaciones por apropiación indebida y fraude Daniel García Andujar como Tecnologies To The People argumenta que el material videográfico utilizado son cookies que se han quedado en su disco duro, sin su permiso, al visionar dichas imágenes en internet. Él, como propietario de su disco duro se siente invadido por estos archivos y os recicla a su manera, exhibiéndolos como propiedad suya. De este modo existe una crítica implícita en la mayor parte de su obra videográfica ya que las proposiciones de igualdad y democracia que pregonan estos medios ocultan una voluntad de vigilancia y censura tras su transparencia ilusoria.